Breve reseña histórica sobre la Iglesia Evangélica en Ronda, Málaga.
Los inicios de la Iglesia Evangélica en Ronda fueron por el año 1885 (Según el autor José María Martínez). Manuel Carrasco proveniente de Málaga realizó un infatigable trabajo en estos difíciles años, viajaba propagando el evangelio por varios lugares en la provincia de Málaga, de su trabajo se beneficiaron grupos de creyentes en Marbella, Fuengirola, Ronda y Jimera entre otros. Posteriormente, a principios de 1900, (Según el escritor Alejandro Stewart) llegó a Ronda el misionero John Harris. Después de muchas experiencias y numerosas oposiciones consiguió encontrar un edificio para casa-misión, con la ayuda de un policía. Esta casa era alquilada, y en ella se hicieron numerosos cambios para adaptarla al fin que fue destinada. Cabe destacar que tan pronto como fue abierta esta casa, una bomba colocada en el porche de la casa causó daños de importancia. Con el transcurso del tiempo, el misionero John Harris, conocido en Ronda como «don Juan», ganó el favor y la estima de la gente. Instauró la Escuela Dominical que alcanzó tal éxito en la población rondeña, que la iglesia católica realizó una réplica de la misma. La obra evangélica en Ronda avanzaba pese a numerosas incidencias; los integrantes de la iglesia fueron boicoteados a raíz de haberse hecho protestantes. Cabe destacar lo ocurrido con don Francisco Orellana, un hombre de mediana edad que atravesaba una terrible depresión, y una tarde se acercó a la estación de tren con la intención de arrojarse al primer tren que pasara, mientras esperaba, John Harris que «casualmente» se encontraba por allí se acercó hasta el hombre y le dió un folleto, el hombre cambió su actitud y aceptó la fe evangélica, y jamás volvió a tener intenciones suicidas. Luego, la iglesia se ubicó en la Calle Jerez, junto al antiguo cuartel de la Guardia Civil, allí en la calle Jerez iban los niños de un colegio privado a tirar piedras al local de reunión, y uno de estos niños que tiraban piedras hace 60 años asiste hoy a la iglesia evangélica, iglesia que iba prosperando hasta que la llegada de la Guerra Civil obligó al pastor de la iglesia a marchar a Gibraltar. La hija de John Harris realizó esta dedicatoria en una Biblia regalada a la Iglesia.
Pasados algunos años tras la Guerra Civil llegaron a nuestra ciudad el hermano Román Perruc, natural de Cuba y la hermana Carmita de La Coruña, ellos empezaron a reunirse con los hermanos de la iglesia que habían quedado y sobrevivido tras la guerra. El lugar de reunión esta vez estaba ubicado en la ciudad. Allí muchas veces sufrieron represalias por el simple hecho de tener una religión diferente. Los niños del colegio privado volvían a apedrear el lugar de reunión, y en no pocas ocasiones practicaban su puntería con la iglesia evangélica como blanco. La policía varias veces llegaba a la casa para ver que se estaba haciendo, en una ocasión todos fueron detenidos e interrogados en la comisaría, luego soltaban así sin más .
Según el artículo 6 del Fuero de los Españoles, publicado en 1945 se declaraba la libertad religiosa y el derecho de reunión. Esta libertad teórica no era una libertad en la realidad. Pasó el tiempo y pese a todos los contratiempos la iglesia evangélica seguía adelante. En 1951 los hermanos Román y Carmita se fueron para Sevilla, y en la misma fecha llegaba a Ronda un misionero americano que se llamaba Roy Dalton. El hermano Roy compró un chalet detrás de donde hoy se encuentra el ambulatorio y lo acondicionó para ser el lugar de reunión. La imagen de la iglesia evangélica no había mejorado, pero muchas personas se acercaban por curiosidad y se quedaban. Así el número de integrantes fue creciendo, en el año 52, treinta y seis personas se bautizaron. Al crecer el número de fieles, el local se iba haciendo pequeño y buscar uno más grande se convirtió en un contratiempo más, nadie quería hacer negocios con los evangélicos, hasta que un día se consiguió comprar una finca en las afueras de la ciudad, una finca amplia y con tres locales grandes, este nuevo templo se ubica en lo que se conoce por «La Torrecilla», donde permaneció hasta 1968. A esta finca la llamamos Betania, como estaba en el campo, la gente no tenía miedo de ir y el grupo de personas en la iglesia creció en gran manera.
Posteriormente el hermano Manuel Bernal, de Rota junto con su esposa Mª Isabel Bravo y estuvieron al frente de la obra hasta el año 1988. La iglesia encaró un periodo difícil debido a la emigración y a la pobreza que sacudía Andalucía en esa época. En esta época venían hermanos escandinavos a hacer campañas (Europa-Campaña) y grupos de la Universidad Oral Roberts de Tulsa, Oklahoma que traía el hermano Juan Calderón. También tuvo lugar la primera reunión interdenominacional de Iglesias protestantes de Andalucía aquí en Ronda.
La familia Prevost llegó a Ronda en 1988 y estuvo aquí durante 4 años. Reformaron la casa pastoral, hicieron Escuelas Bíblicas de Vacaciones, constituyeron un grupo de mimo y trabajaron fuertemente en el evangelismo.
Juan Antonio Robles y su esposa María se hicieron cargo de la obra en Ronda en 1993, pero solo estuvieron hasta el 94.
Tomás Santamarta tomó el relevo hasta el año 97. Inició un programa de radio en Radio Coca, se comenzó a repartir alimentos de Cruz Roja a personas necesitadas y se hicieron varias campañas evangelísticas en Ronda y los pueblos de alrededor.
En el año 2000 llegaron Sidinei y María. Se empezó una obra en Benarrabá y una campaña de donación de sangre. También se dio un fuerte impulso a las misiones con diversas actividades misioneras
Desde el 2004 hasta 2009 Miguel Angel Lagos y su esposa Marisa siguieron al frente de la obra en Ronda, trabajando en otros pueblos como Cortes de la Frontera, Algodonales, Alcalá del Valle, etc.
A partir del 2009 Ezequiel Bernal y Mª Carmen Testón se hacen cargo de la Iglesia ADE Ronda. Abren la Iglesia a la Sociedad de Ronda impulsando el trabajo social y trabajando día a día para llegar a ser «la Iglesia que Dios quiere que seamos»